Más de un año de encierro y una nueva normalidad a la que estamos cada vez más adaptados nos confirmó que nuestro hogar es el refugio más seguro, y que el aislamiento es la prevención definitiva. Tanto tiempo de "ensayo y error" y de estudios y experimentación han resultado en la fórmula ideal para espacios en los cuales podamos ser felices: zonas multitask y diseño terapéutico.
Esta teoría fue la base para crear Alegra, una de las tendencias de base de color para este año, definidas por el grupo de creativos del programa ColorLife trends de Comex. Ellos buscan cambiar el significado de soledad; alejarse del sinónimo de abandono para explicarlo como una oportunidad de encuentro con nuestro interior, de introspección, de optimismo y, por consiguiente, como una cuna de creatividad y de mente abierta.
El diseño terapéutico deja atrás la creación de espacios que sólo son estéticos y funcionales, y busca confeccionar experiencias que influyan en el estado de ánimo de sus habitantes y que funcionen como facilitadores de felicidad, es decir, como una herramienta de apoyo tanto emocional como psicológico.
Las tonalidades azules son las protagonistas en la paleta de Alegra, apelando a sus beneficios psicológicos, pues se trata de uno de los colores más relacionados con la tranquilidad, La Paz, el control y la protección. Alegra da la pauta para experimentar con nuevas ideas y diálogos que brinden una forma más feliz de diseñar y de vivir solos pero acompañados.
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